La luna, redonda, fija,
con su ojo, me miraba.
Que mis pasos no rija,
con mis ruegos, imploraba.
Sus haces, plateados rayos,
como abrazos se prenden.
Son sus abrazos-heridas
que con mi carne se tejen.
Busco el azul del rio.
La muerte me alcanza ya.
Solo sus ondas de frio,
si me envuelven salvaràn,
la vida, que se me escapa,
por no poderte encontrar.
Que lindo, como siempre, muy bueno.
ResponderEliminarme encanta!
"la vida,que se me escapa, por no poder encontrar"
es espectacular!.
Saludos.
agradezco el saludo y lo devuelvo...tambien me deleito en leer tu blog y escuchar y ver los videos. Alicia
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